DAVID BOWIE : UN RELATO QUE NO ACABA

DAVID BOWIE : UN RELATO QUE NO ACABA

Recuerdos, historias e imágenes que celebran el legado y existencia de David Bowie, conmemorando su nacimiento, un 08 de enero de 1947, y en otro aniversario de su muerte, un 10 de enero de 2016. ⚡⚡

En diciembre de 2016 se anunció el estreno del documental que aborda los últimos cinco años de vida y obra de David Bowie, DAVID BOWIE: THE LAST FIVE YEARS, emitido por primera vez en enero de 2017 por la señal 2 de la BBC, a un año de su muerte.

Dirigido por Francis Whately, el realizador trás FIVE YEARS (2013), el último relato audiovisual sobre Bowie se centra en los álbumes The Next Day y Blackstar, registrados y publicados entre 2012 y 2016,  y a través de los cuales se reconstruyen esos últimos cinco periodos de vida y obra del músico inglés, buscando develar su momento personal y artístico. Revelando material inédito y con los testimonios de su círculo más cercano, esta pieza documental establece nuevas interrogantes y reflexiones sobre el cruce entre las temáticas de su trabajo artístico, la enfermedad y la muerte.

Antes de su estreno, uno de los datos más llamativos revelados fue el conocimiento por parte de Bowie, de su estado terminal de salud solo tres meses antes de su muerte, tiempo en el que Blackstar ya había sido grabado y el vídeo para el gran epitafio «Lazarus» ideado, desarmando un sin fin de conjeturas y respuestas esbozadas durante todo un año respecto a las dimensiones de su trabajo final y de como éste suponía una carta de despedida cuidadosamente elaborada y entregada como regalo al mundo. Idea que el mismo realizador desechó más de una vez en diversas entrevistas como al diario inglés THE GUARDIAN: “Aún no sé si él comenzó a trabajar en Blackstar antes de saber que estaba enfermo o después. / La gente está tan desesperada por pensar en Blackstar como el regalo que hizo para el mundo cuando supo que se estaba muriendo pero creo que es muy simplón pensar así. Hay más ambigüedad en esto de lo que la gente quiere reconocer. No creo que él supiera que iba a morir.”

Tal vez ningún período en la extraordinaria carrera de David Bowie despertó más fascinación, más sorpresa y más preguntas que aquellos últimos cinco años retratados en este documental con un tono íntimo y con los testimonios de la gente que mejor lo conoció, sus amigos y colaboradores artísticos entre los que se encontraban Earl Slick, Gail Ann Dorsey, Gerry Leonard, Carlos Alomar, Sterling Campbell, Donny McCaslin, Maria Schneider, así como su inseparable productor: Tony Visconti.  Y también los artistas y directores de sus últimos videos que tuvieron la fortuna de participar en los últimos proyectos de Bowie (como Michael C. Hall protagonista del musical ‘Lazarus’) comparten sus impresiones de haber trabajado con Bowie durante su vida y sobre todo en esos últimos cinco años del artista. Lo cierto es, que al mismo tiempo, la vida de David Bowie fue un completo enigma durante esos cinco e incluso últimos trece años, para ser más exactos, desde 2003, fecha de la que data el primero de los seis infartos que sufrió. A eso se sumó una larga pausa musical de casi 10 años, el anuncio de un retiro que no fue y un regreso mayor con The next day, donde ya se dejaba sentir cierta atmósfera reflexiva y de despedida. Fue ese gran regreso desarrollado en esos últimos cinco años donde Bowie no sólo comenzó a producir música de nuevo, sino que volvió al núcleo de su trabajo y se ocupó de definir temas vitales para una nueva etapa en su carrera. Precisamente, a partir de este aspecto el film explora el consistente carácter artístico de Bowie, trazando los temas centrales de sus trabajos finales relacionándolos con el resto de su obra en la cual es posible encontrar su profundo deseo de comunicar sentimientos de espiritualidad, alienación y fama de manera insistente desde los años 60 hasta 2016.  Temas y desasosiegos en los cuales radicó su consagración y éxito como el creador de una música que trató la problemática de lo que significa ser humano de una manera que va más allá de la paleta normal de una estrella de rock. Con este entramado la película no es una panorámica de su carrera, sino una exploración en profundidad de momentos clave que muestran como esos temas, enfoques y narrativas fueron coherentes dentro de una cambiante paleta creativa a lo largo de los años.

Intuición, premonición o simplemente visión, esa misma visión que no dudó en aplicar al crear, quien sabe. El relato no acaba. Aquí en la tierra continuaremos elaborando teorías al respecto, simplonas, sentimentales o rebuscadas, porque Bowie además de dejarnos un legado de arte interminable, también nos ha dejado trabajo para hacer. “No había nada predecible sobre David Bowie. Todo estaba diseñado para intrigar, desafiar, desafiar todas las expectativas».

Spread the love

cronicasonora2

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *