PERROSKY : PERSIGUIENDO EL BLUES LOCAL
Perrosky acaba de publicar Dos Caminos, su undécimo álbum compuesto por trece tracks nacidos y trabajados entre 2017 y 2023, dando vida a un regado y profundo blues roll con domicilio en Santiago de Chile.
Por Rossana Montalbán
Fotos: Álvaro Guerra
Fue hace más de dos décadas cuando Alejandro y Álvaro Gómez iniciaban una suerte de camino alterno a lo que era por ese entonces su banda madre Guiso, con la cual protagonizaron una nueva camada de rock local, bajo el alero de su grandioso y perdurable proyecto discográfico independiente Algo Records.
Perrosky fue el nombre de ese incipiente brillo que mostraba primero, a Alejandro en solitario, y luego, a los hermanos juntos, en una discreta y minimalista veta de dúo, entre lo acústico y lo eléctrico, fuertemente enraizado en el rock and roll y el blues de viejo cuño, añejo como el whisky más fuerte y la madera más noble. Desde ese momento, los dos hermanos llenos de ocupaciones musicales, mantuvieron ese recondito lugar que fue abarcando la multiplicidad de un viejo sonido curtido de calle, vivencias y pellejerías que, en esencia era blues, rock and roll primitivo, folk eléctrico y, finalmente también folclor como lo era Atahualpa Yupanqui, Roberto Parra o Robert Johnson en el Delta Mississippi.
Pero las referencias, preferencias e inclinaciones musicales de los hermanos Gómez, son ciertamente infinitas, y en ese largo gusto por la guitarra, la canción cruda y sus variaciones, hace solo un par de años (2022) se sumergieron en el cancionero de Lou Reed para grabar un disco tributo al cantautor urbano más salvaje y oscuro de su generación, solo por el placer de hacerlo, reinterpretando canciones como Walk on the wilde side o Vicious, otra muestra de su profundo amor las infinitas formas de vida del rock and roll.
No es casualidad que a veinte años de sus primeras presentaciones, ya con un importante recorrido y una abultada discografía en la espalda, Perrosky entregue un robusto larga duración compuesto por trece tracks en el que el dúo hace honor a su bagaje por las rutas de ese sonido que parece atraversarlo todo, a veces luciendo más ropaje, otras veces más desnudo, en un disco que comenzó a trabajarse en 2017, antes de la pandemia y antes de un millón de otras cosas, para terminarse en 2023, y salir al mundo hace casi un mes con el nombre de Dos Caminos, undécimo álbum en el que la banda establece con total propiedad esa doble vía que forma parte de su música y su tratamiento, que va de un lugar a otro, es decir, de lo acústico a lo eléctrico, de lo primitivo a lo elaborado como cuando el dúo crece a trío a lo largo del disco para dejar entrar el teclado en Domingo, el Lapsteel en La Ola, el sintetizador en Cordel, el contrabajo en Bala perdida, o los violines en Cordel, todo eso para mostrar esos tramos muchas veces olvidados en el cruce sonoro de géneros tan esenciales como los que explora, cultiva y rehace la dupla.
En este re-correr que se extendió por más de cinco años, entre canción y canción, surgieron piezas como Machi o Pluma, y los singles preliminares Lento, La ola, y el primero de ellos titulado Algo más, tributo al ciertamente influyente Eddie Cochran, sí, el mismo autor de Summertime blues, haciendo con ello también una suerte de introducción para nuevos interesados en descubrir el pasado imperioso de rock and roll inciático. Pero no sólo eso, porque el cruce entre cantautoría, blues y folclor, se afirma nuevamente, con el track Sanar, dedicado al muy desconocido músico Juan Capra, suerte de trovador maldito considerado el gran olvidado de la Nueva Canción Chilena.
Dos Caminos, junto con ser un cuidado álbum de profundo blues roll, es también «un álbum de confesiones y luchas internas, sobre el compañerismo y la fe en la naturaleza» señalan, donde el imaginario universal de ambos estilos se funde con el personal y reflexivo sentir de quien escribe, forma que ha sido uno de los sellos distintivos de su música desde su primer disco.
Con años de trabajo compositivo y otro importante periodo de producción y trabajo en estudio de la mano de Alejandro Gómez, autor de cada canción original, guitarra, voz y alma que sale a recorrer las calles en busca de inspiración, registrando, absorbiendo y reinterpretando el blues, ese blues americano que, sin esperarlo, también encuentra raíz en esta larga y angosta faja de tierra, donde Perrosky con este Dos Caminos, continúa persiguiendo la posibilidad cierta de un blues local con domicilio en Santiago de Chile.
El álbum en formato vinilo será co-editado en España junto a Folc Records.
El dúo presentará en vivo su nuevo larga duración el próximo 10 de agosto en Bar de René. Entradas AQUÍ.