SILVIO PAREDES : UNA MÚSICA BAILABLE
El más reciente proyecto del también Electrodomésticos y Los Mismos, se viste de fiesta para ir tras el virulento espíritu bailable bajo los códigos de la electrónica y el sonido orgánico. Silvio Paredes y Los Grandes Bailables, regresan al escenario del bar cultural Klama este martes 07 de junio.
Por Rossana Montalbán
Fotos: cortesía de Klama
Probablemente la inquietud y el hambre musical han sido los principales motores que han conducido, durante más de 35 años de trayectoria, al eximio y explorador Silvio Paredes, primero, en la década de los ochenta como parte de una de las bandas más sobresalientes del new wave y el art pop electrónico y experimental surgido en estos rincones, Electrodomésticos, referente único en su especie para el catálogo musical chileno, y cuyos principales atributos fueron precisamente, estar conformada por jóvenes compositores de alto bagaje musical capaces de surtir e introducir nuevos sonidos en una escena underground hambrienta de arte y creatividad.
Tras la separación de los Electro, Paredes continuó explorando e importando los sonidos del mundo al Chile de los noventa, con el valorado y revelador proyecto musical Los Mismos, pioneros de la electrónica más contundente en esta tierra, un lugar adjudicado tras la publicación de su citado álbum de 1996, Trip o matic.
A tales incursiones, le siguieron una prolífica faceta solista iniciada oficialmente en 2010 y en permanente movimiento, plasmada en discos conceptuales, música incidental y composiciones de ambient, y al mismo tiempo, en su rol como innovador innato en el bajo eléctrico y pionero en Chile del Chapman Stick, instrumento y técnica que se ha encargado de cultivar y divulgar, como los músicos más estudiosos hacen, produciendo dos festivales internacionales dedicados a su sonido y práctica.
Recientemente, y luego de su encuentro musical con la poesía y la experimentación sonora junto a Colombina Parra en Las Flores del bien, Paredes continúa en el perpetuo frenesí de la exploración del sonido, las formas, los géneros, y las variaciones, esta vez evocando ritmos virulentos, en lo que se ha hecho llamar Silvio Paredes y Los Grandes Bailables, un título que bien leído logra darse a entender por sí mismo desde el inicio, y donde la premisa, quizás, parece ser que toda gran pieza bailable, es, por sobre todo, una poderosa y consistente mezcla de groove, ritmo y vigor. Así Paredes, acompañado de una banda ad hoc compuesta por Cuti Aste, Marcelo Filippi y Pancho Guitar, se aventuran a la reformulación del baile y el jolgorio conjugando la electrónica minimalista, los elementos del funk y el pop, entro otros, para ir tras la fiesta interminable bajo sus propios términos.