THE BLACK CROWES: EL VUELO POR LAS RAÍCES DEL ROCK
La banda de los hermanos Robinson se presenta por segunda vez en Chile, esta vez en su propio festín, celebrando su fabuloso disco debut Shake your money maker, un álbum que tres décadas después coloca en perspectiva el pasado y el presente del rock and roll americano. La banda se presenta este sábado 11 de marzo junto a los locales The Versions.
Fue en enero de 1996 cuando la banda de Georgia se presentó por primera vez en Chile como teloneros de la legendaria pero también cáotica presentación de Page y Plant en el estadio Sausalito de Viña del Mar. Todo un acontecmiento para la reciente agenda de mega recitales en el país que lograba comprar el codiciado tour de los fundadores de Led Zeppelin en su formato de dúo acústico que por esos años los devolvía a los escenarios poniendo su firma de dinosaurios del rock and roll en plena era de joven rock neventero. Rock que evidentemente guardaba la herencia directa del legendario cuarteto británico, tal y como lo profesaban los Black Crowes, en esos años ya consolidados desde la aparición de su disco debut Shake Your Money Maker de 1990. Para ese entonces la banda ya registraba tres discos, y un sonido amasado desde las entrañas de la música sureña norteamericana donde no solo ocurría el blues, el country o el hard rock, sino también una nueva generación de college rock que los Crowes supieron recoger y digerir en favor de su propio sonido. Con esas credenciales la banda de los hermanos Robinson llegó a Chile como el perfecto show de apertura para el debut de Jimmy Page y Robert Plant. Para esos años, la banda no era masivamente popular en un Chile donde un año antes The Rolling Stones habían convocado tímidamente, y gozaba de autollamarse un país poco rockero, los desconocidos Cuervos Negros calentaron el escenario con una contagiosa muestra de rock en sus términos hasta la inesperada caída de un pesado generador eléctrico en la mitad de su gig, interrrumpiendo el momento en que la banda comenzaba a conectar con la audiencia, retrasando el intinerario de ellos y el dúo.
Veintisiete años, toda una vida de música sobre los escenarios, una separación y un regreso han pasado desde ese accidentado primer encuentro con este pedazo de tierra. Tras su comentada separación y su esperada reunificación los Black Crowes tomaron el tiempo en sus manos y no demoraron en salir de gira a finales de 2020 para la gran gira aniversario de su esplendoroso disco debut Shke your money maker de 1990. Una gira que venía con la bajada de «tour mundial», y que solo en 2022 anunció su llegada a Sudamérica, marcando el once de marzo de 2023 como la fecha para su reencuentro con Chile.
La banda de los hermanos Robinson parece retornar en gloria y majestad con motivos suficientes para recordarle al mundo cómo sonaba el nuevo rock sureño a principio de los noventa en pleno auge del rock alternativo, porque su irrupción en la escena musical norteamericana en 1990 fue tan peculiar como dificil, rodeados de un momento cultural que solo quería escapar del viejo rock para gritar Kill your idols, grito que sin duda pareció ahogarse en el camino con la captura de las grandes corporaciones y Mtv levantando al rock alternativo como la última sensación del momento. Sin embargo, más allá de las tendencias del mainstream o la antojada industria musical de la época, The Black Crowes supo escapar al clamor del momento, publicando un improbable disco debut que plasmaba y celebraba con colores propios gran parte de la tradición del rock y la música norteamericana. En ese ineludible compendio de sonidos y géneros reinaba el blues seminal, el soul, el R&B, algunos destellos de funk, rock sureño, hard rock y también los sonidos que los hermanos Robinson habían abrazado en su adolescencia punk y garage college, donde aparecen influencias vitales e inimaginables para algunos como sus coterráneos y referentes locales R.E.M o las guitarras The Replacements.
Con el impulso de la primera vez y la energía creativa de unos principiantes hambrientos por hacer su propia música, el disco se compuso y grabó en tan solo dos meses y medio, en tres diferentes estudios, logrando en tiempo breve un puñado de composiciones definitivas que formarían parte del disco que sería editado por la nueva compañía discográfica del afamado productor Rick Rubin, American Recordings.
Cuenta la banda que el proceso creativo y de registro del disco fue sencillo, inspirado y fluido, con gran capacidad de trabajo por parte de cada uno de los jóvenes miembros, buscando sobre todo la toma única, con la mano de su productor guía George Drakoulias. En ese camino, para lograr el mayor potencial en su pronunciado estilo rock and roll sureño, la banda se completó con dos nombres claves, el histórico tecladista de Allman Brothers y The Rolling Stones Chuck Leavell y Laura Creamer corista de Bob Seager y Van Morrison, dos experimentados músicos de sesión en las ligas del género que aportarían la experiencia musical y una valiosa impronta.
El disco fue publicado el 13 de febrero de 1990 dejando a primera esucha la impresión de una banda de rock de su tiempo donde la escuela de viejas glorias es puesta sobre un lienzo lleno de frescura, fuerza y crudeza marcada por la poderosa voz de Chris Robinson, y el versatil slide de su hermano Rich como los sellos distintivos del sonido que la banda logra capturar magistralmente en lo que hoy es llamado un debut perfecto donde destacaron a primera escuha su track incial Twice as hard, seguido de la rolinga Jelous Again, ambos convertidos en singles por su arrolladora y lograda energía entre el pasado y ese presente. Groove, medio tiempo, ritmo, apertura, frescura, en cada track de enraizada alma blusera, sureña y soul, intercalada con la fiereza de guitarras abiertas y el slide, los Cuervos sentaron las bases del llamado nuevo rock americano, comenzando la historia de, quizás la última gran banda de rock and roll americano de nuestros tiempos.
La banda se presenta en Chile este sábado 11 de marzo en Teatro Caupolicán, a las 21 hrs, junto a la banda local The Versions.