DEEP PURPLE: HARD ROCK EN EL TIEMPO

DEEP PURPLE: HARD ROCK EN EL TIEMPO

Deep Purple deja su huella en 2024 con un flamante nuevo álbum de estudio, titulado =1, donde la banda sólo termina por glorificar su estatus indiscutible como forjadores del rock pesado desde finales de los sesenta hasta el día de hoy.

Por Rossana Montalbán


Los históricos Deep Purple acaban de lanzar en julio pasado su flamente nuevo disco de estudio, titulado =1, del cual se conocieron con antelación tres adelantos, Portable door, Pictures of you, y Lazy Sod. El álbum editado en múltiples formatos, regenera el estatus longevo y mayor de quien es señalada como una de las bandas fundacionales del rock pesado desde finales de los sesenta.


 

¿Quién hubiera pensado que Deep Purple editaría un disco de estudio de tamaña vigencia y tamaña permanencia en su sonido? quizás todo fiel seguidor y seguidora de su música, pero ciertamente, el resto del mundo no lo vio venir, distraído por las novedades y el retro rock de nombres actuales que aluden a la época dorada del hard rock.  Mientras el acontecido y prolífico mundo del metal extremo, secretamente enamorado de Purple, también se deja encandilar por la expertise de uno de los cimientos de aquel puente que permitió el desplazamiento de blues rock al rock pesado, y del rock pesado al heavy metal hasta un largo etcétera.



La verdad es, que el primer single de adelanto ya presagiaba el formidable estado de la banda que, por lo demás, no para de tocar temporada tras temporada, aún bordeando los ochenta años de edad de sus integrantes.  Pero la duda era cuál sería el estado de la banda en estudio, una pregunta que comienza a responderse desde el inicio de Show Me, abriendo el disco y demostrando con ello ser una banda renacida, donde de inmediato resalta la interacción entre las teclas y la guitarra estableciendo su posición de manera elegante mientras agregan esa magia individual que siempre los elevó entre la pesadez y el ritmo. Una introducción sutil pero a la altura de la leyenda que da paso al siguiente A Bit on the Side, con ritmo  vertiginoso pero altamente melódico, mostrando el estado vital de una banda que supera los cincuenta años de carrera, con “sangre nueva” en sus filas, más nunca opacando a los miembros originales.

Riffs directos, solos de teclado psicodélicos y una muestra de lo virtuoso que puede ser su miembro más joven, el recientemente integrado Simon McBride, con un solo de guitarra que despliega una mixtura entre tecnicidad e interpretación.  Al mismo tiempo que el terce track del álbum guarda el sabor de su etapa noventera, confirmando que el disco es una suerte de recorrido por las distintas épocas de la banda, en sus momentos más acabados y altos.

A continuación suena Portable Door, uno de los primeros temas destacados, con el espíritu de algo que podría haber sido extraído de su álbum Perfect Strangers, desplegando segundos emocionantes y suspensivos para entrar en un penentrante y seductor rock pesado, como también ocurre al dejarnos llevar por Old-Fangled Thing, de ritmo animado y arriba,  seguida de las múltiples capas de If I Were You; un equisito corte de medio tiempo, melódico y bluesero como emocional y reflexivo.

Producido una vez más por el experimentado Bob Ezrin (Alice Cooper, Pink Floyd, Lou Reed, Kiss, Peter Gabriel), =1 es el primer disco que cuenta con el guitarrista Simon McBride, quien ingresó a la banda tras la partida de Steve Morse en 2022. La formación actual de Deep Purple se completa con los miembros clásicos Ian Gillan (voz),Roger Glover (bajo) e Ian Paice (batería), junto con el tecladista Don Airey. Formación que da vida a un disco que puede satisfacer a los puristas de toda la vida como a los recién iniciados en Purple, con una producción matizada pero visceral.

Pictures of You, en el ombligo del álbum, fue también su segundo corte de difusión conocido meses antrás. La misma, nos arroja a una zona de confort entre el Deep Purple clásico y su faceta melódica radial, principalmente presente en sus lanzamientos del nuevo milenio, un track que sirve además como el pase perfecto a la entrecortada y groovera  I’m Saying Nothing, siguiendo con uno de los momentos más reflexivos del álbum, donde Don Airey y McBride regalan conexión entre sus instrumentos dejando ver la química alcanzada.

Los maestros regalan un guiño a los años del Mark II en Lazy Sod, oda al hard rock, puro y directo: un clásico instantáneo. Pero la muestra de una perfecta mixtura entre lo pasado y lo moderno también continúa a pasos agigantados en Now You’re Talking, la cual sigue manteniendo los pies en el acelerador, entregando la dosis de mayor intensidad plasmada en el disco.

Pero el fabuloso estado de la banda continúa su propi curso con posibles éxitos como la exótica No Money to Burn, la baladista I’ll Catch You, o el enorme y exigente epílogo Bleeding Obvious, dejan el ansia encendida para repetir el plato y volver a repasar tan perfecta obra de hard rock clásico. Con un sonido casi obscenamente vivaz, esta leyenda todavía puede dejar a todos los demás gloriosamente en el polvo y situarse en la cima de los mejores grupos de hard rock de todos los tiempos, mirando a todos los que están por debajo de ellos con una sonrisa irónica y un guiño cómplice. Deep Purple suena y brilla, sin necesidad de depender de la nostalgia, aseguran.


Como si fuera poco, para celebrar su lanzamiento van a hacer más de 60 conciertos en todo el mundo este año durante la gira =1MORE TIME, Sin ir más lejos este 17 de septimbre en Estadio Santa Laura junto a Journey.


 

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cronicasonora2

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