HEAVY ROCKS: LA SAGA DISCOGRÁFICA QUE CONTINÚA
La serie de discos titulada Heavy Rocks, iniciada en 2002 por la banda japonesa Boris, llega a su tercera entrega este 2022 con un primer e incendiario adelanto llamado «She´s Burning».
Por Rossana Montalbán
Formados en 1992 primero como cuarteto y luego como trio, la banda japonesa Boris se ha configurado como un innovador y rupturista proyecto de hard rock experimental desde su aparición a principio de los noventa, consagrándose como tal, a nivel global, en 2002 con la inauguración de la serie de LPs titulada Heavy Rocks, un disco que, precisamente, propuso y dispuso del rock y la vanguardia japonesa y occidental para reconfigurar el, a veces, maltratado género, dando pie a nuevos cruces e inexplorados horizontes para un hard rock de nuevo siglo capaz de evocar lo más tradicional de la escuela con elementos del shoegaze o del ambient, siendo capaz de imprimir en él, el ineludible ADN musical japonés.
Inscritos en la corriente sabbática del hard rock devenido en el denominado stoner fuzz, Boris ha explorado los universos sonoros del ruido, la densidad y la atmósfera como nadie antes lo hizo, ampliando los límites de un subgénero que fue vital para la renovación del heavy rock en su momento, y donde la intervención de Boris como maestros de la vanguardia japonesa dio cabida a un punto de inflexión osado y propositivo en el abordaje del hard, mientras el mundo miraba y vivía interminables revivals.
La saga discográfica continuada casi una década después con Heavy Rocks 2011, vino marcada por la inserción de pistas programadas, sintetizadores de carácter electro pop y una explosiva molotov de metal sónico brillantemente coronado con la participación de Ian Astbury de The Cult como copiloto de un viaje espacial de hard rock inmersivo e incendiario de un Boris que siempre deja aturdidos a sus oyentes.
Con una producción discográfica que sobrepasa los 25 albumes, la banda integrada por Takeshi en bajo y voz, Wata en guitarra, teclados y voz, y Atsuo en baterías y voz, hoy celebra treinta años de viaje con una gira por Norte América que los devuelve a los escenarios tocando el disco de 2002 de forma íntegra, mientras que la nueva música marca su regreso a Relapse Records, tras la edición de NO en 2020, y solo meses después de la aparición de su disco W a través de Sacred Bones, todo esto en un contexto irremediablemente distinto al anteriormente conocido, y al que ellos aluden en su reciente mensaje: «El mundo ha cambiado en los últimos dos años. El pensamiento de todos es más simple y pragmático. Ahora, es más fácil para todos comprender lo que es importante para cada uno de nosotros. Lo dejamos para el futuro y lo transmitimos. El alma de la música rock está en constante evolución. Un alma que trasciende las palabras y el significado para llegar a ti: instinto, intuición y colmillos. Este es el “heavy rocks” de Boris ahora”.
Nuevamente, casi una década después Heavy Rocks suma una tercera entrega a su serie, hasta ahora como trilogía, que verá la luz en agosto de este año. ¿Continuación, inflexión o final? Aún no lo sabemos. Por ahora, el adelanto conocido como «She´s burning» enciende la anaranjada llama mientras los días corren en espera de esa nueva y siempre enigmática pieza del rompecabezas que es el pesado rock bajo los términos de Boris.